LA CABRERA

Hace unos días fuimos a comer a este tradicional Restaurante de Buenos Aires, no por nada elegido durante 3 años consecutivos en el ranking de la revista Restaurant.
Ir a comer a La Cabrera es una experiencia que merece la pena ser vivida al menos una vez. Es un combo donde la excelente atención, la ambientación, la cantidad de distintos platitos de acompañamientos y la carne lo hacen perfecto.

Llegamos con reserva en el segundo turno un miércoles a la noche, pero así y todo tuvimos una espera de aproximadamente media hora para ingresar. En otro contexto, esta situación hubiese hecho que nos retiremos indignados, pero en este Restaurante saben conquistarte. La espera la suavizan con un carrito en la puerta donde podés servirte Chorizo, salame y queso acompañado de unos pancitos y algún aperitivo o agua.

Después de visitar varios de los salones que tienen, nos sentamos en una mesa sobre la ventana, del primer salón. Apenas nos sentamos, Ivana, la mesera, se presentó y nos ofreció las distintas opciones, cabe resaltar que nos brindó una atención excelente durante toda la noche. Mientras decidíamos, nos acercó una bandejita con paté Leberwurt y aceitunas verdes y negras.

Mientras esperábamos las empanadas, comenzaron a llegar los platitos que acompañan la carne, los van trayendo durante todo la cena. Arrancamos con choclo con queso parmesano y una salsita de pimiento amarillo excelente.

Llegaron las empanadas  de carne que venían acompañadas de dos salsas, si mal no recuerdo chimi churri y una picante. Las empanadas muy buenas.

Luego llegó el momento del Asado que decidimos acompañarlo con papas fritas con cebollas confitadas. Las porciones son para compartir y te ofrecen sacarlas en dos puntos de cocción distintos, lo que es fantástico si uno lo prefiere más cocido. Cuando digo que son para compartir, es porque lo son realmente, nosotros que somos de muy buen comer tuvimos que dejar un poco de carne. Durante todo este lapso te van trayendo a la mesa puré de manzana, de zapallo, ajos confitados, berenjenas, guacamole, tomatitos, corazón de alcaucil, distintas salsitas y demás.

De postre elegimos la degustación de helados caseros, que son realmente muy buenos, consiste en 4 bochas con 4 cucuruchos. Luego nos acercaron dos copas de Champagne para cerrar la noche.

Para terminar una hermosa comida, junto a la cuenta traen un árbol lleno de chupetines para que cada uno se agarre los que quiera. Fue una hermosa sorpresa encontrar caramelos de Coca Cola que ya no se consiguen fácilmente.



Nos quedamos con ganas de las mollejas, volveremos a ir para probarlas.






Sin dudas La Cabrera es mucho más que una simple Parrilla, ellos te hacen vivir una experiencia gastronómica. Por eso no es para nada económica, pero creo que es un lugar que alguna vez todos tenemos que visitar y disfrutar. Otro dato a tener en cuenta, es que si bien el precio es elevado, tiene diversos descuentos que lo hacen más razonables (Club La Nación, Galicia Eminent, etc). También brindan menú ejecutivo de lunes a viernes al mediodia (excepto feriados) por $350, que incluye entrada a elección entre Chorizo, Morcilla o Empanada, de principal Asado Americano con guarniciones frías y calientes y helado de postre, con una copa de vino, gaseosa o agua.


CABRERA 5099, PALERMO
CABRERA 5127, PALERMO