miércoles, 23 de septiembre de 2015

Tarta de Cebollas Caramelizadas, Panceta y Gruyere

Me considero una persona con muy buena memoria para algunas cosas, y tengo algunos disparadores mentales que me ayudan a recordar cosas que quizás no tengan ninguna importancia pero que es más fuerte que yo y las recuerdo. En la gran mayoría de los casos, me pasa con mis dos pasiones: Independiente y la Comida. De esta forma, es normal escuchar en mí frases como “No me acuerdo casi nada de ese Casamiento, pero me acuerdo que había un Lemon Pie riquísimo” o “Me acuerdo que ese día jugamos con Boca, ganamos 2 a 1, con dos goles de Insua”, sabiendo que ese día pasó hace más de 10 años. Y lo que es más común que me pase es unir ambas conexiones, es decir recordar por cada partido (más que nada los importantes), que comí ese día o el día anterior. Así puedo recordar el guiso de lentejas de la noche anterior al ascenso, las pastas de mi suegra del anteúltimo clásico de local e incluso el arroz con mariscos que preparó mi suegra el día del descenso, ese puedo recordarlo, aunque apenas lo probé de la tristeza que tenía.

Así es como esta tarta va a quedar en mi cabeza como la que preparé la noche anterior del partido con Racing en el que les ganamos 3 a 0.
Para la tarta preparé una masa Brisee, que es una masa bien crocante, con una importante cantidad de materia grasa, que a mí me encanta. Lo importante para que salga bien, es tener en cuenta que la manteca no tiene que derretirse, por lo que no hay que amasarla, sino solo unir los ingredientes. Comienzo poniendo los 250gr de harina con los 125gr de manteca (se puede hacer con las cantidades que quieran, siempre respetando que la manteca sea la mitad de la cantidad de harina). Para unir los ingredientes se pueden usar un cornet, para no trasladarle el calor de la mano a la manteca o ir desarmando la manteca junto a la harina con los dedos y frotándolo unos segundos entre las manos, si lo ven como algo muy complicado, se puede hacer en la procesadora y listo. Una vez que están unificadas manteca y harina, se le agrega un huevo, una pizca de sal y entre 30/40ml de agua fría. Se amasa hasta obtener una mezcla homogénea (no en exceso por el tema de la manteca), se le pone film y se guarda al menos 30 minutos en la heladera.

Para el relleno usé dos cebollas moradas y dos comunes, 150 gr de panceta, un paquete de Quesabores de Provolone y Pategras y aproximadamente 250 gr de Queso Gruyere cortado bien chiquitito. Las cebollas las corte en pluma y las cociné durante bastante tiempo con aceite de oliva en una sartén, les agregué sal, pimienta, pimentón dulce ahumado y una cucharita de azúcar. La panceta la desgrasé cocinándola en una sartén sin aceite, ni ninguna materia grasa (solo con la que desprende la propia panceta). Una vez que estaban listas estas dos preparaciones, las junté, les agregué los quesos y un chorrito de crema de leche.

La masa la estiré, la cociné durante unos minutos sin el relleno (con un papel aluminio con arroz o garbanzos arriba para que no se achique la masa), luego le retire el mismo y le agregué el relleno, volvió al horno hasta que esté todo bien dorado.
Así la disfrutamos esa noche, sabiendo que al otro día teníamos el Clásico de local, con esa hermosa ansiedad que transmite el fútbol y esa gran tranquilidad de que de local no nos pueden ganar hace  más de 11 años. Así es como cada vez que la coma, voy a sonreir y me voy acordar de ese golazo de Mendez, de esta hermosa pasión que me dejaron mi abuelo y mi viejo y que por suerte la puedo compartir con mi esposo.

Ingredientes:
Para la Masa:
250 gr de Harina
125 gr de Manteca
1 Huevo
1 Pizca de Sal
30/40 ml de Agua

Para el Relleno:
2 Cebollas Moradas
2 Cebollas Comunes
150 gr de Panceta
250 de Queso Gruyere
Un chorrito de crema
1 cucharita de azúcar
Sal, pimienta, pimentón a gusto.






domingo, 6 de septiembre de 2015

Goulash con Spaetzles

 Recuerdo con mucha felicidad la primera vez que probé el Goulash, era un plato que siempre me llamó la atención, pero que por temor a que no me guste, aunque a veces lo veía en cartas de Restaurant, no lo pedía. En su reemplazo siempre me aseguraba el placer con algún plato de pastas con Bolognesa. En una de las ediciones de la Feria Masticar me decidí a probarlo entre tantas otros platos que uno come en esos eventos y fue un enamoramiento total. En ese caso lo ofrecía el Restaurant Austria. Todavía siento la felicidad que sentí al probar el primer pedacito de carne en ese punto tan perfecto de cocción que se te desarma en la boca.
Pasaron unos años hasta que me decidí a hacerlo en casa, y desde que probé, lo preparé durante tres fines de semana seguidos, mi familia me lo reclama constantemente y si uno tiene el tiempo para empezar a prepararlo bastante antes, aunque lleva su tiempo y su trabajito, realmente vale la pena.
Lo estoy haciendo con Roast Beef, un corte de carne bastante económico para lo que sale el resto de los cortes en general, si o si, hay que cocinarlo mucho mucho, sino es una carne gomosa que no es rica. Yo lo cocino entre 2 y 3 horas. Según lo que cuentan era un plato que cocinaban los trabajadores más humildes, con cortes de carne de muy baja calidad que luego de tanta cocción toman un gusto excelente. Yo lo comí con lomo y no queda tan gustoso como con el Roast Beef, pero es un gusto personal de cada uno y pueden probar con el corte que más les convenza. 


Corto el Roast Beef en pedacitos bastante pequeños (un poco más grande que para las empanadas cortadas a cuchillo), los condimento con sal y pimienta blanca molida y los salteo con aceite de oliva en una olla con unos dientes de ajo aplastados (si tengo mucha cantidad lo hago en dos tandas). Mientras la carne se va cocinando, corto en Juliana morrón rojo, verde y cebolla en pluma. Retiro de la olla la carne con su juguito de cocción, y cocino en esa misma olla las verduras con aceite de oliva, les pongo sal para que desprendan sus líquidos y se cocinen más rápido sin pegarse, ni dorarse. Una vez que están cocidas, les agrego la carne con su juguito de cocción. Y en este momento de la preparación le pongo el ingrediente estrella del goulash que es la Paprika o Pimentón, yo le pongo bastante, porque amo lo picante, igualmente le pongo pimentón picante y pimentón dulce.

Preparo un caldo de carne (lo ideal es hacer un caldo de verdad, pero en la mayoría de los casos lo hago con los calditos comprados). Le incorporo a la preparación el caldo de carne hecho con dos de estos picaditos, una lata de tomates cubeteados y dos cucharitas de extracto de tomate.  Trato de no agregarle sal en este momento, ya que los calditos comprados suelen ser bastante salados y tanto la carne como las verduras fueron salpimentadas en su momento, rectifico en caso de ser necesario una vez avanzada la cocción.
Para los Spaetzles, que son una mezcla entre ñoquis y fideos malformados,  hago una mezcla con los huevos, la leche y la soda (o agua gasificada), para unir los ingredientes utilizo una cuchara de madera, una vez unificado le agrego la harina tamizada, tiene que quedar una mezcla ligera, de ser necesario le agrego más líquido, lo condimento con sal, pimienta blanca molida y un poco de nuez moscada. Se pueden comprar un rallador especial para prepararlos, que están aproximadamente entre $150 y $200, pero si en tu casa no tenés, podes hacer uno casero con un colador o haciéndole unos agujeritos a un tupper. Yo tengo al genio de mi Sobrino, que no solo le hizo los agujeritos al tupper, sino que con una tanza lo ató a la base de un colador, y puedo engancharlo en la olla de agua hirviendo para no tener que sostenerlo. Bueno, con estos aparatitos comprados o caseros, se arman los Spaetzles. Se ponen sobre la olla de agua hirviendo, se echa un poco de la mezcla y en el caso del comprado se corre el plástico para que se vayan rallando y en el caso del casero, se va aplastando con una cuchara de madera para que se vayan cortando.  El tiempo de cocción es minimo, una vez que flotan se retiran del agua hirviendo y se ponen en un bols con agua fría, la cual se tiene que ir cambiando para que permanezca fría. Se hacen en varias tandas porque sino se pasarían de cocción los primeros en caer.

La carne la dejo cocinar entre dos y tres horas y queda impresionante, para servirlos se puede optar entre hacerlo por separado o mezclar todo en la olla y que se sirvan juntos, esa es la opción que yo elijo. Algunos les agregan un poco de crema de leche, para mí sin ella queda excelente.
Ahora a probar de hacerlo y disfrutarlo!!!

Ingredientes para 4 personas:
1,5 Kg de Roast Beef u otro tipo de corte.
2 Morrones Rojos
1 Morrón Verde
3 Cebollas
Para los Spaetzles:
500 de Harina
5 Huevos
100 ml de Leche
100 ml de Soda
Sal, pimienta y Nuez Moscada c/n